EL CIRCO - FERNANDO BOTERO
Laura Bedoya Giraldo
c.c 1036654999
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La palabra circo, viene del latín
circus, que significa círculo, y en la antigua Roma, era el lugar donde
se celebraban las carreras de cuadrigas. En la comedia del Teatro griego y en
Roma, ya aparecía un tipo de personaje cómico que se burlaba de los actores y
así fue como nació el bufón que entretuvo a los nobles y a los reyes europeos. Durante el renacimiento italiano, por el año de 1550, surgió
la Comedia del arte, un espectáculo popular en la que actuaban bufones y
acróbatas, caracterizados con máscaras y ropa estrafalaria. Uno de ellos era el
Arlequín, que siempre se vestía con ropas remendadas hechas a base de rombos de
colores. También apareció un sirviente tonto, que con el tiempo se convirtió en
el payaso que ahora conocemos.
Con la
aparición de distintos artistas en los actos circenses se llegó a la conclusión
de que este es el medio por el cual estos singulares personajes se expresasen,
es decir, sus actos son un fehaciente reflejo de su forma colorida y diferente
de ver el mundo, cada uno de estos plasmando en sus actos su cotidianidad.
Fue en el
año de 1888 cuando Fernando Botero tuvo su primer encuentro con un circo, este
fue con el Circo Hermanos Atayde el cual en su momento llamó su atención, pero
años más tarde en un reencuentro con este, fue una fuente de inspiración para
desarrollar su arte. Creando así una exposición compuesta por dibujos y
pinturas admirando lo colorido de estos actos y en la cual se adentra en lo
profundo del circo, es decir, en la cotidianidad de sus personajes y como estos
pasan su vida cuando estos no están siendo el centro de atención.
“Porque esta
serie sobre el circo solo puede provenir de un pintor que en su madurez no ha
perdido su infancia y en su rigor no desconoce la capacidad transformadora de
la poesía” Juan Gustavo Cobo Borda
Al no ser
una crítica de arte, no puedo ofrecer un juicio sobre la obra del maestro
Fernando Botero porque considero sería atrevido de mi parte; lo que considero pertinente
es expresar es lo que sentí cuando asistí a dicha exposición. Algo que me llama
mucho la atención es el cambio de perspectiva que se da con el pasar de los
años, a lo que me refiero es que en mi niñez disfrute y admire mucho los
circos, tanto los de barrio, esos que con lo poco que tenían se veía el
esfuerzo de sus integrantes para lograr hacer un show diferente; como también disfrute
de estos circos que son famosos, se promocionan y van por diferentes países del
mundo como en este caso lo es “El circo
de los hermanos Gasca”, disfrute mucho de sus shows de malabares, acróbatas, del
espectáculo que eran y de la curiosidad que despertaban esas personas que como
nombro el profesor en clase son llamados bichos raros pero sin duda lo que más
disfrute en ese tiempo fue ver los animales incluidos en este show, situación
que actualmente no comparto y me parece un total abuso con seres que no son traídos
al mundo para trabajar. Concluyo entonces que admiro esos circos que con poco
hacen mucho y que admiro la capacidad que tiene el hombre para entretener.
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